¿Conseguir ‘completar’ un entreno fácil es debido únicamente a la dificultad que presenta o también entra en juego tu visualización para conseguirlo?
Sí, ya sabemos que un entreno fácil es más fácil (valga la redundancia) que uno difícil, pero…
¿no será en parte porque al saber que es ‘fácil’ estás más predispuesto a conseguirlo?
A lo largo de los muchos años que llevamos entrenando a ciclistas, nos hemos encontrado con muchos deportistas que cuando saben que tienen que hacer por ejemplo 8 series de ‘lo que sea’, lo primero que piensan es “…bufff, yo no puedo hacer 8…” pero si les decimos que hagan 5 entonces les cambia la cara y dicen “…venga, voy a por esas 5 series…”
El caso es que la visualización está mucho más presente de lo que piensas, ya que “visualizar” no es únicamente cerrar los ojos y pensar en una situación concreta, sino que por el hecho de “pensar” en esa situación, inconscientemente la estás visualizando (no te formas imágenes visuales en tu mente, pero sí que activas procesos de razonamiento en tu subconsciente).
Nuestro consejo es que aprendas a visualizar de manera consciente y sepas qué es lo que te interesa visualizar.
¿Que toca hacer 8 series y no te ves capaz?
Pues piensa en cómo te encuentras haciendo sólo 5 series.
¿Que toca hacer 4 horas de sesión y te parece demasiado?
Pues piensa en cómo te encuentras haciendo 3 horas.
En ningún momento te estamos diciendo de “hacer menos” de lo previsto, sino que lo que buscamos es que en vez de “visualizar” una hazaña demasiado grande y limitarte tú mismo antes de empezar, “dividas” la hazaña pensando en lo que sí te ves capaz de hacer.
El objetivo de este ejercicio es tener una predisposición positiva y enfrentarte con optimismo a tus objetivos.
Este consejo puedes aplicarlo a más facetas de tu día a día y no solo al deporte… seguro que se te ocurren muchos ejemplos para aplicar la visualización positiva.